Vivimos en un Estado de ¿Derecho? Sí, del derecho de los bancos y los banqueros. Me daría vergüenza formar parte de un gobierno cuyo partido está implicado en tramas de corrupción y el propio presidente esté implicado y bajo sospecha. Lo único que nos queda es la esperanza de que los jueces y el sistema judicial no se corrompan y hagan bien su trabajo y salven a esta democracia degenerada y anticuada. Aunque no puedan ir más allá de los intereses del propio gobierno. Ahí tenemos el ejemplo de Baltasar Garzón.
Yo no puedo sentirme representada por un gobierno que salva a los bancos, a los cuales nos han sumido en esta situación, y en cambio han dejado al pueblo en la estacada.
Porque sí, porque es muy fácil mandar desde un despacho, desde una cúpula o élite mandataria. Lo difícil es salir a la calle, mezclarte con el ciudadano de a pie e interesarse por sus problemas. Claro, es difícil cuando lo único que te importa es cobrar sobre tras sobre.
A mí este gobierno no me representa, no me legitima por eso llamo a la DESOBEDIENCIA CIVIL. No es justo, ético ni moral que haya gente durmiendo en la calle y suicidios por culpa de los desahucios ejecutados por una banca corrupta. Suicidios que pasan a ser homicidios; y banca que ha surgido y ha sido creada para obtener beneficios a partir de los dineros del pueblo, del de abajo.
¡SOMOS LOS DE ABAJO Y VAMOS A POR LOS DE ARRIBA! Querer es poder, y podemos acabar con esto.
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